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El papel de las PYMEs en la reducción de la huella de carbono
| Por John Gagel, Director de Sostenibilidad de Lexmark
La sostenibilidad también aporta beneficios financieros. Las PyMEs pueden aportar un gran valor a la labor en la reducción en la huella de carbono.
ETIQUETAS: Responsabilidad Social Corporativa, Small Business
El papel de las PYMEs en la reducción de la huella de carbono
Las grandes compañías y marcas de renombre suelen ser las organizaciones que asumen la responsabilidad de la sostenibilidad corporativa. Y la mayoría de las veces, son éstas las grandes emisoras de carbono en comparación con las PYMEs, pues dados los beneficios para la reputación asociados a las iniciativas ASG (Ambientales, Sociales y de Gobernanza), son este tipo de empresas las que intensifican sus acciones sostenibles de frente al exterior. Con grandes presupuestos y recursos a su disposición, es fácil suponer que las grandes organizaciones deben ser las que lideren la carga en términos de sostenibilidad, pero las empresas de todas las formas y tamaños deben contribuir a reducir la huella de carbono.
En su última carta anual, Satya Nadella, consejero delegado de Microsoft, aborda la sostenibilidad y afirma que todas las empresas, grandes y pequeñas, que se esfuerzan por alcanzar el éxito económico también deben tener en cuenta sus avances en esta materia. Sin embargo, un informe de Lloyd's Bank de principios de este año reveló que hasta cuatro millones de pequeñas empresas no tienen planes para una transición neta cero. Para mover realmente el tablero de la sostenibilidad, todo el mundo tiene que desempeñar un papel, incluidas las PyMEs. Estas pequeñas pero poderosas empresas son igual de importantes a la hora de inspirar y liderar iniciativas ecológicas. ¿Cómo pueden poner manos a la obra?
¿Qué ventajas tienen las PYMEs?
Dar prioridad a la sostenibilidad e impulsar iniciativas ecológicas no sólo beneficia al propio planeta, sino que también aporta otras ventajas a las organizaciones.
En primer lugar, pueden ayudar a contratar personal. Cada vez son más las personas que eligen a sus empleadores en función de sus acciones en materia de RSC e impacto social, incluido el posicionamiento de una organización en materia de sostenibilidad. Los estudios han demostrado que la Generación Z, que ya está firmemente establecida en un lugar de trabajo, es mucho más propensa a quedarse con un empleado basándose en valores sociales positivos. El estudio de Bupa descubrió que el 64% de los jóvenes de 18 a 22 años considera importante que los empleados actúen en cuestiones medioambientales, y el 59% afirma que permanecerían más tiempo con el empleador si puede demostrar que actúa en este ámbito. Incluso con una plantilla reducida, la contratación y el crecimiento de una empresa requieren contar con las personas adecuadas, por lo que es importante tener en cuenta lo que la gente quiere de su empleador para poder elegir bien entre las fuentes de talento.
Mostrar una visión positiva y progresista de la sostenibilidad también aporta beneficios financieros, especialmente para las PYMEs que buscan inversión. De hecho, el 59% de los inversores han rechazado una oportunidad de inversión en los últimos 12 meses por motivos de sostenibilidad. Las empresas que pueden demostrar a los inversores que están creciendo y que tienen credenciales sostenibles de peso probablemente recibirán más fondos y optimizarán su crecimiento.
Por último, mostrar auténticos avances en sostenibilidad puede influir positivamente en la reputación de una empresa. Es más probable que la gente confíe y compre a una marca que se preocupa por los valores sociales, incluido el medio ambiente. Por tanto, ser capaz de mostrar y promover referencias sostenibles puede ayudar a aumentar la base de clientes y, potencialmente, llegar a nuevos públicos.
Cómo las PYME pueden mover el tablero
Los minoristas mundiales, en particular, atribuyen alrededor del 95% de las emisiones a sus cadenas de suministro, que probablemente incluyen miles de pequeños proveedores. Por tanto, si las PYME progresan y lideran sus propias iniciativas de sostenibilidad, también pueden contribuir a las redes de organizaciones más grandes y, en última instancia, estar a la vanguardia de los cambios en el comportamiento sostenible.
Incluso con menos recursos y presupuestos más reducidos, las PYME pueden hacer pequeños cambios para asegurarse de que hacen lo que pueden para salvar el planeta. Una forma es elegir trabajar con proveedores o socios que tengan sólidas referencias medioambientales, algunos de los cuales requieren poco o ningún presupuesto. Por ejemplo, Ecosia es un motor de búsqueda que planta árboles cada vez que un usuario realiza una búsqueda. El motor de búsqueda destina el 100% del dinero que obtiene a través de los anuncios a plantar árboles para compensar sus emisiones. Otra forma es limitar las herramientas y materiales que utiliza la organización a los que cuentan con la certificación CarbonNeutral®. Los dispositivos de uso cotidiano en la oficina, como impresoras, ordenadores y teléfonos, empiezan a ofrecer opciones neutras en carbono para las organizaciones con conciencia ecológica: Busque soluciones que cuenten con certificaciones como la CarbonNeutral® de Climate Impact Partners.
Ahora que el nuevo año nos acerca al punto de partida crucial de 2025, que muchas organizaciones se esfuerzan por alcanzar en cuanto a objetivos y progresos en materia de carbono, las empresas que hagan de 2023 el año del cambio sostenible no sólo contribuirán de forma significativa a los objetivos de cero emisiones netas, sino que también cosecharán recompensas económicas, de reputación y personales en el progreso.